Esta receta se puede hacer con ingredientes frescos, es decir que no hayan sido cocinados previamente, o ya cocinados, como el caso de la pechuga. Cuando hago cocido siempre suelo guardar la carne para hacer croquetas, puesto que en casa nos encantan. Hay días que las hago con pollo y jamón y otros como este caso con la pechuga y el bacon.

Las croquetas son un plato que permite mil variaciones y ademas aprovechar aquellos restos que tengamos por la nevera. Son un poco entretenidas de hacer, pero a la hora de comerlas merece la pena el tiempo invertido en ellas.

Y ahora a disfrutar de la receta!!!

Ingredientes.

1 pechuga de pollo

4 filetes de bacon gruesos

1/2 cebolla

60 gr de harina

120 ml de leche

Nuez moscada

Pimienta blanca

2 ajos

Perejil

Sal

Pan rallado

Elaboración.

Lo primero que haremos será trocear muy fino el bacon y la pechuga de pollo.

Picamos los ajos y la cebolla, lo ponemos junto con la carne en una sartén, hasta que este todo dorado, añadiremos la pimiemta blanca, la nuez moscada y la sal.

Añadiremos la harina y la doramos un poco.

A continuación añadimos la leche poco a poco que se vaya ligando la bechamel.

Vamos removiendo hasta que se quede dorada y bien ligada, que la masa se quede un poco dura para poder hacer después las croquetas.

Dejamos enfriar, y empezamos a darle forma a las croquetas, empanamos con el pan rallado y freímos.

Retirar del fuego.

Se pueden servir solas o con alguna salsa, yo les puse salsa barbacoa, por ser de carne pero le podeis añadir cualquier otra.

Y ahora a cocinar!!!